San Mateo 22:2-5
El reino del cielo también puede ilustrarse mediante la historia de un rey que preparó una gran fiesta de bodas para su hijo. Cuando el banquete estuvo listo, el rey envió a sus sirvientes para llamar a los invitados. ¡Pero todos se negaron a asistir! Entonces envió a otros sirvientes a decirles: La fiesta está preparada. Se han matado los toros y las reses engordadas, y todo está listo. ¡Vengan al banquete!. Pero las personas a quienes había invitado no hicieron caso y siguieron su camino: uno se fue a su granja y otro a su negocio.
Jesús trajo a la tierra El Reino de los Cielos, que en esta parábola se compara a una boda a la que también estás invitado. Pero la historia cuenta que no quisieron participar, razón por la cual en vez de fiesta hay sufrimiento.
No te quedes mirando las noticias, preocupado, aturdido, decepcionado, viendo que no hay soluciones inmediatas. Este es un tiempo para aprovecharlo y acercarte a Dios, sin excusas, aceptando hoy mismo su invitación.
Ora así: Padre Dios acepto esta invitación y ser parte del Reino de los Cielos. Ayúdame a superar cada problema y entrar en tu fiesta. En el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Viernes!