Tu Alimento Diario

2 Cronicas 33:11-13

El Señor envió a los comandantes de los ejércitos asirios y tomó al rey Manasés prisionero. Le pusieron un aro en la nariz, lo sujetaron con cadenas de bronce y se lo llevaron a Babilonia; pero cuando estaba sumido en profunda angustia, Manasés buscó al Señor su Dios y se humilló con sinceridad ante el Dios de sus antepasados. Cuando oró, Él lo escuchó y se conmovió por su petición, hizo que Manasés regresara a Jerusalén y a su reino. ¡Entonces Manasés finalmente se dio cuenta de que el Señor es el único Dios!

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Manasés había sido el peor rey de la historia de Israel, arrastrando a toda la nación al pecado y a la idolatría, y como consecuencia de ello a la esclavitud y a la destrucción. Pero en medio de la angustia, se arrepintió y Dios lo restauró.

Si hoy sientes que estás sufriendo consecuencias de tus pecados pasados, no termines este año como prisionero, busca a Dios, pídele perdón y libertad. Comienza el año con expectativas de bendición.

Ora así: Padre Dios, al terminar este año me humillo ante Ti, te pido perdón y libertad de toda esclavitud. Bendice y guíame en todo lo que haga en este nuevo año. Perdona y bendice nuestra nación. En el Nombre de Jesús, amén.

¡Bendecido Jueves!