Tu Alimento Diario
Amós 4:6-8
Hice que pasaran hambre en cada ciudad y que hubiera hambruna en cada pueblo, pero aun así, ustedes no se volvieron a Mí, dice el Señor. Yo detuve la lluvia cuando sus cosechas más la necesitaban. Envié la lluvia sobre una ciudad pero la retuve en otra. Llovió en un campo, mientras otro se marchitaba. La gente deambulaba de ciudad en ciudad buscando agua, pero nunca había suficiente; pero aun así, ustedes no se volvieron a Mí, dice el Señor.
Así como un buen padre le pone límites y disciplina a sus hijos para encaminarlos y que el día de mañana les vaya bien, Dios también toma medidas para transformarte, para que te vuelvas a Él, porque en Su presencia hay abundancia y bendición.
Sé humilde, vuelve ahora a Dios.
Ora así: Padre Dios, gracias por encaminarme. Me arrepiento por mi desobediencia y rebeldía, te pido perdón por mis pecados, me vuelvo a Ti. Dame tu bendición y sana nuestra nación. Te lo pido en el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Domingo!