Tu Alimento Diario
2 Corintios 9:7-8
«Cada uno debe decidir en su corazón cuánto dar; y no den de mala gana ni bajo presión, porque Dios ama a la persona que da con alegría. Y Dios proveerá con generosidad todo lo que necesiten. Entonces siempre tendrán todo lo necesario y habrá de sobra para compartir con otros.»
Decide dar a los demás a la manera de Dios, con alegría, gratitud, espontáneamente, generosamente sin esperar nada a cambio, y se activará esta promesa. No solo que no te faltará, también te sobrará para que sigas compartiendo con los demás.
Ora así: Padre Dios, recibo esta enseñanza, y daré con alegría sin esperar recompensa tal como Tú lo haces conmigo. En el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Martes!