Tu Alimento Diario
Salmos 25:3
Ciertamente ninguno de los que confían en Ti será avergonzado. Serán avergonzados los que se rebelan sin causa.
Frente a todas las dificultades, decide confiar exclusivamente en Dios, creyendo en sus Promesas y dejando de lado palabras humanas, opiniones negativas, que terminan debilitando tu fe.
Dios es quien abre puertas y allana tu camino, para que puedas llegar al mejor lugar. Él es tu Salvador, tu Sanador, tu Proveedor, tu Protector. Confía, ¡no serás avergonzado!
Ora así: Señor, sé que siempre me ayudarás, que me guiarás para no equivocarme, y por eso me entrego en tus manos en absoluta confianza, creyendo que no seré avergonzado. Lo declaro en el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Lunes!