Tu Alimento Diario
Salmos 127:1
«Si el Señor no construye la casa, de nada sirve que trabajen los constructores; si el Señor no protege la ciudad, de nada sirve que vigilen los centinelas.»
Al comenzar cada día ponlo siempre en las manos de Dios. A tu trabajo y esfuerzo, en cualquier cosa que emprendas, busca la guía, la bendición del Señor.
¡Hasta una ciudad queda desprotegida, por mejor seguridad que tenga, si no busca la Guia y la protección de Dios!
Ora así: Padre Dios, reconozco que he actuado en mis propias fuerzas sin mayores resultados; por eso hoy busco tu Presencia, tu ayuda para todo lo que haga.
También te pido la paz para mi ciudad. En el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Domingo!