Tu Alimento Diario

San Juan 5:6

«Cuando Jesús lo vio y supo que hacía tanto que padecía la enfermedad, le preguntó: ¿Te gustaría recuperar la salud?»

Mientras algunos son indiferentes, critican, sugieren paliativos puramente humanos, Jesús “ve” tu sufrimiento y se detiene para solucionar tu problema de raíz. «`¡Recibe a Jesús y el milagro que necesitas!«`

Haz lo mismo con los demás, detente un momento para preguntarles acerca de su problema, ora con ellos, diles que Jesús se acercó a sus vidas. Serán sanos y salvos eternamente.

`Ora así:` Padre Dios, gracias por detenerte a mi lado para terminar con mi sufrimiento. Decido hacer lo mismo con mi prójimo, a mostrarles tu amor y poder, a invitarles a que te reciban en sus vidas y hogares. Amén.

¡Bendecido Viernes!