Tu Alimento Diario
Salmos 116:7-9
Que mi alma descanse nuevamente, porque el Señor ha sido bueno conmigo. Me rescató de la muerte, quitó las lágrimas de mis ojos, y libró a mis pies de tropezar. ¡Así que camino en la presencia del Señor mientras vivo aquí en la tierra!»
Caminar junto al Señor es garantía de extraordinarias bendiciones. Así las enumeró el famosísimo Rey David:
1) liberado de muerte a manos de sus impiadosos enemigos;
2) consolado por pérdidas, traiciones, desprecios sufridos;
3) renovado en sus fuerzas para conducir a su nación a una época dorada.
¡Dios es bueno!Camina cada día a su lado y estas bendiciones también te seguirán.
Ora así: Padre Dios, creo en tu Palabra y por eso decido caminar a tu lado. ¡Líbrame, consuélame, renuévame, guíame! Te lo pido en el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Viernes!