Tu Alimento Diario
Salmos 25:12-13
«¿Quieres tú servir al Señor? Él te mostrará el mejor camino. Te hará disfrutar de bienestar, y tus descendientes heredarán la tierra.»
Servir a Dios no es exclusivo sólo de algunos, es también para ti. Ama a tu cónyuge, dedica tiempo a tus hijos, trabaja como para el Señor, estudia para servir a los demás, visita al enfermo, ayuda al pobre, comparte este alimento diario, apoya a quienes comparten la Palabra de Dios.
Si lo haces, te promete bienestar y herencia para tu descendencia.
Ora así: Padre Dios, creo en esta Promesa y para activarla decido servirte cada día en todo lugar. En el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Martes!