Tu Alimento Diario

Hechos 27:22-23

¡Pero anímense! Ninguno de ustedes perderá la vida, aunque el barco se hundirá. Pues anoche un ángel del Dios a quien pertenezco y a quien sirvo estuvo a mi lado.

Cuando sientas que las tormentas de la vida tratan de hundirte, que el dinero no alcanza, que el médico ya no sabe qué hacer, recuerda que aún en el naufragio ¡Dios está a tu lado para salvarte! ¡Reanímate!

Ora así: Padre Dios gracias por estar siempre a mi lado, hasta en los momentos más difíciles, cuando incluso otros me abandonaron. Tengo vida, creo hay esperanza, recibo tu ánimo, para seguir luchando. En el Nombre de Jesús, amén.

¡Bendecido Jueves!