Tu Alimento Diario
San Juan 14:1-3
No dejen que el corazón se les llene de angustia; confíen en Dios y confíen también en mí. En el hogar de mi Padre, hay lugar más que suficiente. Si no fuera así, ¿acaso les habría dicho que voy a prepararles un lugar? Cuando todo esté listo, volveré para llevarlos, para que siempre estén conmigo donde yo estoy.
Cuando Jesús se estaba despidiendo de sus discípulos, antes de ser crucificado, les deja la promesa de una vida eterna, animándoles a que no se angustien por los problemas presentes y que confíen en Él.
En estos tiempos difíciles, el mismo mensaje es para ti: confía en Él y recibe por fe vida eterna.
Ora así: Padre Dios, creo que Jesús murió para que tenga vida eterna y, en este tiempo presente, renuncio a estar angustiado para estar confiado en Ti. En Su Nombre, amén.
¡Bendecido Sábado!