Tu Alimento Diario

Salmos 30: 6-7

«Cuando yo tenía prosperidad, decía: ¡Ahora nada puede detenerme!. Tu favor, oh Señor, me hizo tan firme como una montaña; después te apartaste de mí, y quedé destrozado.»

‭‭

Cuando te apoyas en lo material, en tus propias fuerzas y habilidades, sin tener presente que todo lo que tienes es por el favor de Dios; no sólo estás provocando que Él se aparte de ti, sino que también atraes la maldición sobre tu vida.

Busca humildemente cada día la bendición del Señor, pide perdón por tus pecados, y ten la seguridad que, aún en los peores tiempos, Él permanecerá a tu lado para mostrarte la salida.

Ora así: Padre Dios, reconozco que me he apoyado sólo en mis fuerzas y confiado en mis posesiones. Pero hoy reconozco que lo material es temporal y efímero, y decido buscar cada día tu Presencia y bendición, que me hace firme como una montaña. En el Nombre de Jesús, amén.

¡Bendecido Sábado!