Tu Alimento diario
Hechos 20:34-35
«Ustedes saben que mis dos manos han trabajado para satisfacer mis propias necesidades e incluso las necesidades de los que estuvieron conmigo. Y he sido un ejemplo constante de cómo pueden ayudar con trabajo y esfuerzo a los que están en necesidad. Deben recordar las palabras del Señor Jesús: “Hay más bendición en dar que en recibir” ».
El Apóstol Pablo escribe como su vida es un ejemplo, que siempre y de alguna manera, se puede ayudar a otros.
Esta es una llave a la felicidad, y a la prosperidad, que la encuentras en dar sin esperar nada a cambio, cuando das y esperas recompensa, sueles recibir frustración, pero llevando alegría y felicidad a otros, te conviertes en una persona feliz, la bendición y la felicidad están cuando das algo tuyo para ayudar a otros.
Ora así: Señor gracias por tus palabras, ayúdame a entender este misterio, para que con mis manos, mi presencia o mis palabras, pueda dar a quien lo necesita, te lo pido en el nombre de Jesús, amén.
Bendecido Jueves!