Tu Alimento Diario
Isaías 54:17
No existe el arma que pueda destruirte. Dejarás callado a todo el que te acuse. Esto es lo que Yo doy a los que me sirven: ¡la victoria! ¡El Señor es quien lo afirma!
Cuando tienes sueños grandes, metas importantes, proyectos ambiciosos, los problemas a enfrentar también serán grandes y de diversa índole: económicos, de salud, familiares, acusaciones falsas, amenazas injustas.
Sin embargo, si decides seguir a Jesús, servirle a través de todo lo que hagas durante el día, hay una promesa de victoria segura, y ningún “arma” con la que el enemigo intente atacarte podrá vencerte.
Ora así: Padre Dios, decido ser tu hijo, servir con mis acciones a Jesús. Recibo esta Promesa y creo que ningún ataque es lo suficientemente fuerte para vencerme. La victoria es mi herencia como tu hijo. Lo declaro en el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Martes!