Tu Alimento Diario
Tito 2:11-14
Pues la gracia de Dios ya ha sido revelada, la cual trae salvación a todas las personas. Y se nos instruye a que nos apartemos de la vida mundana y de los placeres pecaminosos. En este mundo maligno, debemos vivir con sabiduría, justicia y devoción a Dios, mientras anhelamos con esperanza ese día maravilloso en que se revele la gloria de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo. Él dio su vida para liberarnos de toda clase de pecado, para limpiarnos y para hacernos su pueblo, totalmente comprometidos a hacer buenas acciones.
Es difícil entender la gracia de Dios: Jesús entregándose voluntariamente para perdón de todos tus pecados, posibilitándote a que nazcas de nuevo para buenas acciones y darte vida eterna.
Martín Lutero dijo: “Me mire a mi mismo y vi que era imposible salvarme, mire la cruz de Jesús y vi que era imposible perderme”.
Acepta el sacrificio que Jesús hizo por ti, recibe por fe, completa salvación, comienza a hacer buenas acciones.
Ora así: Padre Dios, gracias por haber enviado a Jesús a dar Su vida por mí. Te pido perdón por mis pecados, recibo la salvación prometida, nazco a una nueva vida. En el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Miércoles!