Tu Alimento Diario
Salmos 119:28
Lloro con tristeza; aliéntame con tu Palabra.
La Palabra de Dios tiene el poder de cambiar todo tu ser cualquiera sea el estado. Sus Palabras siempre dan fuerzas al cansado, consuelo al enlutado, visión al desorientado, perdón al pecador, sanidad al enfermo.
Incorpora cada día una Palabra a tu vida, aplica el Consejo de Dios frente a cada adversidad y desafío, y experimenta resultados extraordinarios.
Ora así: Padre Dios, necesito el aliento de tu Palabra. Recibo tu consejo, perdón, consuelo, visión, sanidad, fortaleza, para tener esos resultados.
Te lo pido en el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Sábado!