Tu Alimento Diario

Hebreos 12: 1-2

Por eso, nosotros, teniendo a nuestro alrededor tantas personas que han demostrado su fe, dejemos a un lado todo lo que nos estorba y el pecado que nos enreda, y corramos con fortaleza la carrera que tenemos por delante. Fijemos nuestra mirada en Jesús, pues de él procede nuestra fe y Él es quien la perfecciona.

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Todos pueden correr la carrera de la vida con éxito: hombres y mujeres, niños, jóvenes y ancianos. Pero hay algunas condiciones para que seas un ganador:

1) Quítate el pecado de encima, es un contrapeso que no te deja alcanzar las metas.

2) Corre la carrera con fuerzas sobrenaturales. Para ganar no son suficientes las tuyas.

3) Saca la mirada de los problemas y ponla en el Señor, porque de Él viene la fe y Él la perfecciona.

Ora así: Padre Dios, decido anotarme en esta carrera, y por eso me arrepiento de mis pecados, pongo mi mirada en Jesús, y recibo sus fuerzas. En el Nombre de Jesús, amén.

¡Bendecido Domingo!