Tu Alimento Diario
San Lucas 17:11-15
Mientras Jesús seguía camino a Jerusalén, llegó a la frontera entre Galilea y Samaria. Al entrar en una aldea, diez hombres con lepra se quedaron a la distancia, gritando: ¡Jesús! ¡Maestro! ¡Ten compasión de nosotros! Jesús los miró y dijo: Vayan y preséntense a los sacerdotes. Y, mientras ellos iban, quedaron limpios de la lepra. Uno de ellos, cuando vio que estaba sano, volvió a Jesús, y exclamó: ¡Alaben a Dios!
De diez personas que se acercaron pidiendo un milagro sólo uno volvió a dar gracias; el resto siguió su camino y se olvidó de darle gloria a Dios.
Agradece a Dios por cada día, por Su cuidado, por Su provisión, por cada aliento, por los milagros que ha hecho en tu vida y que posiblemente hasta pasaron desapercibidos.
Ora así: Padre, reconozco que no te he dado suficientemente las gracias. Hoy me detengo para agradecerte todo lo que haz hecho, haces y harás por mí. En el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Martes!