Tu Alimento Diario

Salmo 119:49-50

«Señor, recuerda la promesa que me hiciste; es mi única esperanza. Tu promesa renueva mis fuerzas; me consuela en todas mis dificultades.»

Nadie está exento de pasar por tiempos de dificultad, dolor, tristeza, pérdida, amenazas, debilidad; pero cuando llegue ese momento, recuerda y apóyate en cada Promesa de Dios.

“Cuando pases por las aguas, Yo estaré contigo, si pasas por el río, no te ahogarás, cuando pases por el fuego, no te quemarás.”

Repite cada Promesa, para recibir consuelo, nuevas fuerzas y vuelvas a tener esperanza.

`Ora así:` Padre Dios, creo en tus Promesas, ellas son mi esperanza y fortaleza. Por eso, declaro, que aunque esté atravesando un impetuoso río de problemas, no me ahogaré, porque Tú estarás conmigo. En el Nombre de Jesús, amén.

¡Bendecido Lunes!