Tu Alimento Diario
2 Corintios 9:6-8
Pero recuerden esto: El que siembra poco, poco cosecha; y el que siembra mucho, mucho cosecha. ¡Dios ama a quien da con alegría! Y Dios es poderoso como para que abunde en ustedes toda gracia, para que siempre y en toda circunstancia tengan todo lo necesario, y abunde en ustedes toda buena obra.
Tomando como ejemplo una ley natural, el apóstol Pablo enseña una poderosa ley espiritual, para que en tu futuro tengas siempre todo lo necesario, cualquiera sea la circunstancia que estés atravesando.
Dios ha puesto en tu vida “semillas” para que las siembres, para que las compartas: tus bienes materiales; tus capacidades, talentos, dones; tu tiempo para aconsejar al amigo.
Si no lo compartes, si te lo guardas, si no lo siembras, estás comprometiendo tu futuro. Si siembras mucho, bendiciendo a otros, tal como declara la Escritura, el poder de Dios se manifestará en tu vida y cosecharás abundantemente.
Ora así: Padre Dios, reconozco que no he sembrado todo lo que he podido, que me he “comido” las semillas, y por esta falta te pido perdón. Gracias por recordarme esta ley espiritual, que voy a poner en acción desde hoy mismo. En el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Sábado!