Tu Alimento Diario
Génesis 3:17-18
«Dado que comiste del fruto del árbol del que te ordené que no comieras, la tierra es maldita por tu culpa. Toda tu vida lucharás para poder vivir de ella. Te producirá espinos y cardos, aunque comerás de sus granos.»
Adán podría haber comido de infinidad de árboles, pero eligió comer del único que Dios le había prohibido, y el resultado trajo maldición sobre su tierra.
De la misma manera, hoy tu pecado maldice tu vida, tu familia, tu trabajo; tu esfuerzo sólo produce cardos y espinos.
Justamente con esas espinas le hicieron una corona a Jesús, para absorber la maldición y derramar toda su vida y bendición sobre ti.
Ora así: Padre Dios, te pido perdón por mis pecados que abrieron puertas para que entre la maldición y muerte a mi vida. Creo que Jesús derramó su sangre para tener acceso a tus bendiciones y recibir vida eterna. Amén.
¡Bendecido Lunes!